La clase de ética me parece realmente interesante, no solo
por su materia sino también por la forma de darla, gracias a mi profesor
Enrique Mesa.
Por su materia porque te hace pensar, sobre el bien y el
mal, te hace más culto y como se dice normalmente saber nunca está de más.
La forma de dar clase es muy importante porque puede hacer
que la clase sea tanto divertida como tediosa. Gracias a mi profesor hace que
estés deseando que llegue su hora, ya que la hace divertida, lúdica e
interactiva. Desde su frase inicial
hasta la línea del cuadrado de la muerte, hace que imponga pero a la vez
divertida. Haciendo bromas es capaz que la clase esté en silencio (cosa muy difícil
con la mía creedme) aunque debería renovar el repertorio. Es un profesor el
cual respetas pero a la vez le coges cariño. Es muy característico su ropa,
puesto que lleva siempre traje; la primera vez que le vi pensé: “Como Barney
Stinson”, pero luego hizo… ¡el cuadrado de la muerte! (chanchaaaaannn….), el
cual trata de que o lleguen 3 rayas en la zona de toda la clase, o en tu
pupitre te quedas el resto de la semana y la semana siguiente sin recreo. Y me
dije a mi misma: “No merece llevar traje”. Mas
este año cuando me dio clase dije: “El sí merece llevar traje”.
La clase en si está bastante bien ya que aprendes y te
diviertes, me gustaría seguir teniendo esta clase (pero con el mismo profesor claro
está).
A sí que: “Queridos niños, queridas niñas y público en
general. Estamos hoy aquí para aprender algo nuevo, ya sabéis nuestro lema,
algo nuevo aprenderéis a menos que escuchéis aunque sea a perder el tiempo con la
dignidad con la que yo la pierdo.”- Cita textual de Enrique Mesa.
Como siempre les invito a comentar, esta entrada como la
mayoría de mis entradas es por parte de la clase de ética.